Un día retuerzo mi cuerpo,
luego lo estiro para alcanzar el sol,
otro día en mi nariz penetra polen de una flor,
y en la noche se apaga mi mente como el final de un tornasol.
Buscando los caminos perdidos
me encuentro yo,
colocando nombre a lo inombrado
y viendo lo feo-lindo de lo aquello imperfecto.
Brincando se puede hacer feliz,
y caminando lo apreciaras mas de una vez,
porque corriendo te cansaras.
Ve, no ocultes tu mirar
perderas los detalles que se ven en una oportunidad.
Tus oídos destapados
porque los gritos del silencio
se haran oír por un momento.
Faldas rotas, pantalones desgastados,
unas cuantas poleras empapadas de lodo,
de las gotas de la lluvia
caída en la tarde anterior.
Rostros de niños
que piden auxilio en su interior
y que el miedo los tiene mudo
porque si lo piden los matarán.
¿Quiénes somos para juzgar?
¿Quiénes somos para no amar?
Primero aprende amarte, luego ama con libertad.
No importa si estas ajeno a la verdad de un cristiano,
lo importante es que valoras tu realidad,
y las realidades de aquellos que se pierden en la oscuridad.
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