Hemos llegado al final de los días que agotaron nuestras fuerzas y derramamos gotas de sudor por el trabajo forzado.
También existieron días en el que lo único que hacíamos era amar.
Jugamos como niños,mirabamos las mariposas volando de un lado para otro como si nunca las hubiesemos mirado.
El mar era tan maravilloso, y a la vez hacía que le temieras por la fuerza que ejercía al romper las olas.
¿Qué fue que hacía tan intensos esos días?