25 noviembre 2009

Una tarde más...

Poco a poco me pierdo en el atardecer que se ve solo en verano, esos largos y acompañados muchas veces solo con tu propia presencia, que a veces no afecta mucho tu animo, ya que te empiezas a acostumbrar a estar solo con ella.
Mirando como pasan las parejas felices y coqueteándose unos a otros, hasta llego a creer que las gaviotas también lo hacen, ¿cómo hacer que eso no afecte?... mmm... no lo sé.

Veo a lo lejos aquel chico que mire ayer en la U y digo "¿qué hace él acá?", se cruza mi mirada con la del, y cada vez se acerca mas a mi, y el pobre sistema nervioso empieza a reaccionar, miro al horizonte, y de repente escucho un "HOLA¡"... "¿qué?... ¿cómo?... me reconocio... oh¡", tal personaje que el día anterior me había mirado todo el rato y yo había hecho lo mismo, ahora esta al lado mío hablandome y sin ninguna explicación; pase toda la tarde conociendolo, ¿puede ser que el destino nos halla juntado o fue solo coincidencia?, o ¿las coincidencias también las hace Dios?

No hay comentarios: